jueves, 29 de octubre de 2009


Congelo esta fase
en la que he quedado
abstraída y sin más pensamiento
que el de pensarte
en el desentierro de tu palabra
seas de una vez.
Congelo mi aparente
estado laxo de quietud interna
donde mi temblor
no se deja ver.
Congelo fraccionada
toda mi respiración
hasta fingirla ilesa
en el minuto espasmo
que me arrojas al vacío
hasta dejarme seca
y sin más opción
que esperar al sueño
venga a mi rescate.
Congelo la humedad de mis ojos
que no dejo se humedezcan
Congelo esa esfera que dibujé
una esfera ,
aunque no sea esfera.
Me inserto en el ojo del inocente
y sin más inocencia te digo
todo aquello que fui
antes que vos
seas en mi.
Congelo la almohada
tu inútil mirada
que se transporta equivocada
donde no voy
media tinta
medio tren
medio andén
y la desidia de tu palabra,
la parada final.
Congelo tu desahogo y tu desatino
y con ellos
congelo
a todos tus perdones
arrimados con el mismo gesto
diciendo, lo que no me dices.
Congelo la ruta
por donde te he encontrado
Congelo tu ida y tu vuelta
y con ellas todo intento
que no pudo ser necesario.
Congelo cada uno
de estos versos que te escribo
congelo esta estrofa
congelo esta poesía toda entera
Congelo una por una
y todas juntas
las partes donde fui
mientras vos estabas
donde yo no era.